- VICENTE FERNÁNDEZ
La puesta en marcha de la línea marítima que une Europa con África, a través de Motril y Melilla, será uno de los acontecimientos de este año y venideros para estas dos ciudades. Deseamos que su impacto alcance el rango de significar un punto de partida para el futuro de ambas ciudades españolas, sobre todo para nosotros. Es la primera vez que vamos a tener una línea regular de comunicación marítima.
Llevamos muchos años lamentando el retraso de la autovía para tener unas comunicaciones decentes por carretera; por aire, ni lo pensamos; del ferrocarril, ni hablamos —es la broma y el cachondeo durante el último siglo (desde el silbido del tren que oyó aquel gobernador civil, Servando Fernández Victorio, en Motril el siglo pasado, hasta la exclusión de estar en el eje Mediterráneo) …y en muy pocos días llega la naviera Armas y pone en marcha comunicarnos con Melilla. Casi nada: Queda abierta una ventana a nuestro desarrollo. Habrá menudeo turístico, pero tal vez será más importante el de la comunicación de mercancías. El buque Volcán de Timanfaya tiene una capacidad para 966 pasajeros, 300 coches y unos 50 camiones. Con esas posibilidades diarias se abre un amplio horizonte para empresarios y todo aquel que quiera establecer relaciones comerciales con Marruecos y el norte de África en unas condiciones no sólo competitivas; sino ventajosas, tanto en precio como en rapidez, demostrado.
A destacar la apuesta personal de Antonio Armas, presidente de la naviera, y la diligencia con que la Autoridad Portuaria de Motril ha dispuesto la infraestructura portuaria necesaria para arrancar y poner en marcha el proyecto.
En la ciudadanía ha despertado interés la noticia y ha sido acogida con ilusión. Por lo que respecta a nuestros representantes públicos, desde el gobierno municipal también se celebra con esperanza de futuro y las grandes posibilidades que se abren. El alcalde, Carlos Rojas, ha indicado entre otras cosas que «la línea marítima va a tener grandes resultados para Motril y «convierte a nuestra ciudad en referente en el abastecimiento, comercio e intercambio socioeconómico con la ciudad hermana de Melilla». «Todas estas inversiones son muy bien recibidas y necesarias, especialmente en estos momentos de dificultad económica para las familias motrileñas»- ha indicado el alcalde motrileño.
Asimismo el máximo responsable de la Institución municipal ha explicando que la travesía Motril Melilla es «única» por la competitividad de sus precios y la corta duración del trayecto- el más corto y más barato de Andalucía con estas condiciones.
La portavoz socialista, Flor Almón, también se suma a destacar la importancia de «la implantación de la línea regular de transporte con Melilla facilitará el tránsito de personas y mercancías entre Europa y el norte de África. Esta circunstancia convierte a Motril en un lugar estratégico en la actividad comercial entre los dos continentes y también en un lugar de entrada y salida de turistas cuyos movimientos contribuirán a crear empleo y mejorar la economía motrileña».
En definitiva, que estamos de enhorabuena. Y si de fecilitarnos por este futuro se trata, lo vamos a hacer también por lo pasado, por una empresa que lleva 40 años apostando por Motril. Un aniversario de cuatro décadas no es frecuente, celebrarlo en los tiempos que corren, menos. Damián Carmona Maldonado lo ha hecho con Sol y Crema, una marca de café que lleva todos esos años con nosotros, de sus inicios y celebración damos cuenta en páginas interiores. Señalar aquí, en El Pulso, que su celebración fue un acto sencillo y entrañable, como debe ser. Damián Carmona estuvo rodeado de sus hijos, Damián y las que hoy están al frente de la empresa Rosa, Elisa y Ana; un grupo de amigos cercanos y los alcaldes de las dos ciudades de sus amores: La que le vio nacer, Adra; con su alcaldesa, Mª. Carmen Crespo; y Motril, donde el café Sol y Crema se tuesta a diario, con su alcalde, Carlos Rojas.
Por lo demás, comentarles las alegrías que nos siguen dando nuestros deportistas y destacar la gran labor que el Ciudad de Motril, con ese grupo de padres entusiastas y buenos monitores de base están haciendo por el atletismo motrileño. Nombrar el ramillete de niños y niñas, que ya se están haciendo mayores -que conozco y sigo desde pequeños-, sería muy largo; por eso me van a permitir una mención especial para Alex y Claudia Martín como resumen de todos ellos. La razón es que la transformación de niña a mujer de Claudia, hoy décima del mundo Junior en 3.000m., es una de mis alegrías cuando vuelvo al pasado y de Alex, su hermano, ¿qué decir?, cuando lleva siendo campeón de España en 800m desde que se mide con sus rivales y ahora lo ha vuelto a ser en Junior.
