Europa Press.-
La comisión municipal de honores y distinciones de Motril, en la costa de Granada, reunida este viernes, ha dejado sobre la mesa la retirada de su Medalla de Oro al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, siguiendo el criterio del equipo de gobierno local, de PP y Más Costa Tropical, de no interferir en el procedimiento judicial abierto contra él
La comisión municipal de honores y distinciones de Motril, en la costa de Granada, reunida este viernes, ha dejado sobre la mesa la retirada de su Medalla de Oro al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales, siguiendo el criterio del equipo de gobierno local, de PP y Más Costa Tropical, de no interferir en el procedimiento judicial abierto contra él.
Es una decisión que ha contado con los votos en contra de PSOE e IU-Verdes Equo, según han detallado a Europa Press fuentes consultadas en este último grupo municipal sobre esta reunión que tiene lugar después de que el pasado 31 de octubre el Pleno del Ayuntamiento de Motril aprobara la constitución de esta comisión instructora con los componentes de los partidos que la conforman este mandato tras las elecciones municipales del pasado mayo.
Luis Rubiales renunciaba este pasado septiembre a la presidencia de la RFEF tras varias semanas de polémica por su comportamiento durante la final del reciente Mundial femenino, que ganó España. Su madre protagonizó una huelga de hambre en su apoyo a finales de agosto en la iglesia de Capuchinos de Motril.
Fue el Grupo de IU-Verdes Equo el que planteó en este contexto dejar sin efecto la concesión de la Medalla a Rubiales. En el Pleno ordinario del pasado septiembre, el equipo de gobierno local derivó el tema al inicio de un expediente con base en un informe de la Secretaría del Ayuntamiento de Motril.
El pasado agosto, cuando trascendió esta iniciativa, desde el Ayuntamiento de Motril indicaron a Europa Press que lamentaban la postura del entonces presidente de la RFEF tanto en lo relativo al beso a la futbolista Jenni Hermoso en la entrega del trofeo como en el comportamiento en el palco de autoridades, ya que no fue lo «más acertado en el puesto» que representaba.
