– Escenario 3. Si hablamos de un estadio intermedio, a medio camino entre la propuesta de la CE y de Van Rompuy (-50.000 millones de euros para el capítulo agrícola) el recorte que sufriría la agricultura española se situaría en el 13,5%.
Con estas cifras, el peso de la PAC en el marco financiero global de la UE disminuirá del 33% actual al 20-25% en 2020, según los cálculos realizados por esta organización. Asimismo, conviene subrayar que en la actualidad la PAC supone apenas un 0,4% del PIB total de los EE.MM de la UE, según datos de la propia Comisión.
En este contexto, COAG reclama al Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, firmeza y determinación para defender el presupuesto de la PAC. Los pagos compensatorios de esta política suponen el 28% de la renta agraria española por lo que las propuestas de recorte limitarían la creación de empleo, el potencial productivo y el desarrollo económico y social del medio rural.
«Los grandes desafíos económicos, medioambientales y alimentarios que debemos afrontar en los próximos años exigen recursos. La PAC es un gran pacto de los ciudadanos europeos con aquellos que producen sus alimentos, los agricultores y ganaderos. A cambio de producir alimentos sanos, respetar el medio ambiente, gestionar el territorio, y en definitiva preservar los bienes comunes para las generaciones futuras, la sociedad debe apoyar el modelo social de agricultura, mayoritario en Europa. Está en juego nuestra soberanía y seguridad alimentaria», ha argumentado Miguel Monferrerco, Secretario Provincial de COAG GRANADA.
En ese sentido, y en un escenario de restricción presupuestaria, COAG considera imprescindible priorizar las ayudas al agricultor activo, aquel que trabajan de forma directa y profesional en su explotación, genera empleo y produce alimentos de calidad de forma sostenible. «No puede ser que nuestro país estén recibiendo PAC unos 912.000 perceptores, mientras que somos 400.000 agricultores y ganaderos profesionales», ha matizado Blanco. Asimismo, también sería vital poner en marcha mecanismos de regulación de mercado que eviten la volatilidad de los precios y garanticen unas rentas dignas para los agricultores.