EL FENÓMENO…
El fenómeno “Efraín”, se llama así, ¿no?, el caso es que se llame como se llame, ya ha hecho de las suyas por nuestro pueblo. Mas concretamente un socavón. Pero no uno pequeño, no, uno de profundidad considerable. Y de daños no hablemos…
Y digo yo: ¿Qué hacen por evitarlo los servicios urbanos de mi pueblo? ¡NADA! Sí, exacto, esa es la respuesta correcta: NADA.
A fin de cuentas, pronto estará arreglado, aunque no hayan sido ellos… y aunque hayan cobrado por ello.
El socavón en cuestión, se encuentra en un paso de peatones, junto a lo que ha sido un banco. Sí, un banco, Bilbao, para más señas. Mas exactamente, en el paso que hay junto a una tienda de ropa en la calle Nueva. ¿Saben dónde les digo? Sí, pues ese.
Bueno hablando de otra cosa. Los de las chaquetas siguen sin darse por aludidos… Sí, los de las chaquetas, digo y digo bien… ¿Por qué papa costea todo? ¿Por qué papa costea? Todo, lo demás y lo de menos, pero el caso es que costea todo y algo más…
Porque para eso está, -me dirán ustedes-. ¿Si no son ellos, quienes van a ser?
¿Mama?, y digo yo ahora…. No sé, pregunto yo. Mama, hoy en día curra, y por ende cobra, gana, es decir, si uno trabaja, uno cobra, y dos más.
En fin, suerte que uno siempre tiene quien le ayude, en la forma que sea. Lo dejamos por ahora. Seguiremos observando la vida, con sus cotidianidades, que nos pueden parecer pequeñas, pero que por el contrario son muy importantes.
Un saludo… Y no olviden INTERACTUAR
¡Hasta pronto!