La hora de H-Andalucía
Sin duda un año sorprendente para todos, estrafalario e incluso surrealista. Pero no es menos cierto que cuando se cierran puertas se abren ventanas y que las oportunidades están ahí, a la vuelta de la esquina. Y seguro que habrá alguna sorpresa más, aunque ya nada nos sorprenda.
Tras los procesos pertinentes y oficiales, aterricé oficialmente un 18 de septiembre en el Hospital Comarcal Santa Ana de Motril como nuevo Jefe de Servicio de la Unidad de Gestión Clínica de Medicina Intensiva. Muy agradecido de la acogida: todo son sonrisas, cariños y miradas cómplices de que si se cree y se trabaja, se puede. Y esa fue la tarjeta de presentación: “Vayas donde vayas, ve siempre con todo tu corazón”. También conté con un cálido recibimiento también de los Jefes de Servicio de las UCI de Andalucía, a través de un grupo de trabajo común sobre la dichosa pandemia. Algo muy de agradecer y que hace sentir esta maravillosa tierra desde el minuto uno, aunque uno sea granaino consorte.
En un verano muy complejo por la dificultad en la contratación de recursos humanos, tanto de médicos como de enfermeras y auxiliares, se plantea un reto apasionante: transformar la realidad para los pacientes, las familias y los profesionales, conseguir un cambio en la cultura organizacional que sea atractivo para que la gente quiera sentir nuestra camiseta, y contagiar esta H-onda H-expansiva a toda H-Andalucía. No partimos de cero, ni mucho menos, tanto en el Hospital Comarcal Santa Ana de Motril como en la Comunidad hay ya ejemplos singulares y muy inspiradores sobre la atención centrada en la persona.
Por motivos obvios, profesionales y personales, mi nivel de motivación es altamente contagioso. No digan que no se lo advertí. Y la propuesta es la más ambiciosa: conseguir hacer el Hospital en el que todos desearíamos trabajar, y en el que todos desearíamos ser atendidos tanto a nivel científico-técnico como a nivel humano. Ésa será nuestra marca diferencial. Y somos partidarios de los sueños.
Si además le sumamos la reciente publicación del Manual de Buenas Prácticas de Humanización para las Urgencias Hospitalarias, muchos de cuyos mimbres son fruto de Andalucía, no me parece para nada pretencioso decir que conseguiremos entre todos ponerle la H delante.
Así que manos a la H-obra, siempre mirando al Sur, y desde la Costa Tropical a la reconquista de la humanización de la Sanidad. Estoy seguro de que entre todos lo conseguiremos: pacientes, familias y profesionales.
Jefe de Servicio de Medicina Intensiva del Hospital Comarcal de Santa Ana.
Director de Proyecto HU-CI
Escritor de “En Primera Línea” Un testimonio de la crisis del Coronavirus
(gabi@proyectohuci.com)