Domingo A. López Fernández
Cronista Oficial de la ciudad de Motril
Fotografías: EL FARO
La efigie de San Bartolomé es solemnemente bendecida en la parroquia de San Antonio de Padua
La parroquia de San Antonio de Padua ha celebrado en la tarde del sábado, 15 de febrero, la bendición de la nueva imagen del apostolado de la Santa Cena que ha de acompañar al Cristo de la Fe en el pasaje bíblico que ya se alza casi al completo en su altar y que rememora la institución de la eucaristía junto a los discípulos. Se trata de la efigie de San Bartolomé, uno de los apóstoles que siguió a Jesús tras su bautismo en el río Jordán y que fue mártir en la India. Constituye ésta la novena efigie de su apostolado que ultima el escultor accitano Ángel Asenjo Fenoy, y que al igual que las que le han precedido, sorprende por su realismo, su calidad artística y su expresividad dentro del grupo que representa la Cena del Señor. Han pasado ya varios años desde que se inició este grupo escultórico en el seno de esta joven corporación que en aquellos momentos solo constituía una asociación parroquial en la que casi nadie creía. La realidad es que el trabajo, la constancia y el buen hacer corporativo han ido dando sus frutos y hoy en día sorprende a lo grande esa concreta escenografía sacra que plasma el pasaje del Banquete del Señor. Adentrarse hoy en día en la ermita es toda una invitación a recordar iconográficamente el sacrificio del Hijo de Dios, que un día antes de su muerte en la cruz reunió a sus discípulos para celebrar la pascua judía.
Desde una semana antes, la junta de gobierno de la hermandad de la Santa Cena había convocado a sus hermanos activos para la bendición de esta novena imagen cuyo logro consideran todo un hito histórico. El acto se había previsto realizar en el transcurso de la eucaristía que todos los sábados, a las 18:30 hrs, se celebra en la ermita. En los minutos previos se notaba ya una gran expectación en todo su entorno, pues se hacían presentes numerosos fieles que llegaban a ocupar por completo todo los bancos del recinto sacro. Asimismo, lo hacía el escultor, D. Ángel Asenjo Fenoy, y D. David Merino Padial, Presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de la ciudad. Otras representaciones cofrades presentes han sido las de la hermandad del Cristo del Perdón, la de Buena Muerte y el Huerto de los Olivos.
Iniciada la eucaristía, ha presidido la misma el consiliario y nuevo párroco de San Antonio, D. Hermes Moreno Arias, quien en su homilía recordó algunos pasajes de la vida del apóstol San Bartolomé y muy particularmente su martirio. Terminada la misma, el párroco ha bajado del presbiterio para rociar con agua bendita la imagen. Posteriormente, se ha procedido al encendido de las velas que exige el rito, que han quedado a cargo del hermano mayor de la hermandad, D. David Vázquez Padial, del vice-hermano mayor, D. Antonio Hernández Salmerón, del Presidente de la Agrupación, D. David Merino Padial, y la del propio consiliario, D. Hermes Moreno. Tras unos segundos de oración, un sonoro aplauso de los fieles presentes ha dado por ultimado el acto de la bendición.
Concluida la santa misa, D. David Vázquez ha accedido hasta el ambón para agradecer la presencia de instituciones, cofradías y fieles en general a esta jornada que según expresó, considera histórica y que supone la llegada de la imagen de San Bartolomé a la parroquia, todo un paso más en la continuación del sueño de completar un día no muy lejano el apostolado que acompañará al Cristo de la Fe.
Por su parte, el escultor D. Ángel Asenjo, dedicó igualmente unas palabras sobre la obra que desde hoy va a presidir el altar de la ermita. En su discurso, desde el punto de vista personal e iconográfico, refería que San Bartolomé fue conocido como Natanael, nombre que significa regalo de Dios. De él dijo que fue pescador y asistió a Pentecostés y las Bodas de Caná y que, al parecer, fue pescador en la India donde fue martirizado arrancándole la piel. Desde el punto de vista iconográfico expuso que su principal atributo es justamente su piel desollada y un cuchillo que fue el instrumento de su martirio. Como bien señaló, en el arte, San Bartolomé ha sido representado por muchos artistas, entre ellos Ribera, Miguel Ángel o el Greco, afirmando que sus restos se encuentran en Roma y que su festividad se celebra el día 4 de agosto.

En cuanto al grupo escultórico, D Ángel Asenjo explicó que ya se encuentran ultimadas nueve imágenes que, “junto al Cristo de la Fe suman ya diez, con lo que se va completando el conjunto al que parecía no verse el fin”. Desde el punto de vista artístico e iconográfico refirió que San Bartolomé mide 1,75 m y representa al apóstol en edad madura, figurando inclinado y apoyado sobre San Simón. Exhibe pelo de color castaño poco intenso con ondas y rizos en la nuca. Asimismo, tiene “la frente despejada y la boca entreabierta de la que parece salir alguna exclamación. El interior esta tallado, luciendo dientes y lengua; su mirada tensa se dirige atentamente hacia el Cristo de la Fe sin distraerse lo más mínimo. Su fuerza expresiva queda patente en el marcado fruncido del ceño en un gesto de disgusto o extrañeza”. Por lo que respecta a la técnica, la imagen está “realizada en madera de cedro y pino con un tratamiento especial de la superficie que sugiere una textura rugosa y castigada como la de su compañero Simón”. En su ejecución, la policromía ha sido realizada “al óleo mediante veladuras y trasparencias y los ojos son de cristal soplado y policromado en su cara interna como se hacía en los siglos XVII y XVIII”. Dentro del conjunto imaginero, San Bartolomé presenta una “postura algo inestable al apoyar en el suelo únicamente su pie izquierdo mientras la pierna derecha flexiona la rodilla sobre la banqueta dejando ese pie al aire. Esto es un recurso valiente y barroco que rompe los límites de la escena para expandirse al exterior, especialmente en su puesta en escena en la calle durante el desfile procesional”.
Finalizada su intervención, por parte de la junta de gobierno de la hermandad se hacía un reconocimiento público a tres antiguas hermanas, Dª Adela Guerrero Gallego, Dª Ángeles Rodríguez Gálvez y Dª Carmen Gutiérrez Quero, en atención a sus muchos años de apoyo y desvelo por engrandecer la corporación cofrade. Las tres galardonadas recibieron un cuadro representativo de sus dos titulares con una dedicatoria especial de los miembros de la junta de gobierno.
Con este acto se daba por concluida la jornada de la bendición, generándose desde estos momentos las incesantes felicitaciones al escultor por parte de hermanos y fieles presentes. En esos momentos, EL FARO tuvo la oportunidad de pulsar la opinión de distintas personalidades, entre ellas la del hermano mayor, David Vázquez Padial, quien refirió que con este acto “seguimos consolidando el grupo escultórico que acompaña al Cristo de la Fe con este noveno apóstol y, con paso firme, si Dios quiere, el siguiente en llegar será Santo Tomás y ya solo quedaría por completar San Judas Tadeo y Judas Iscariote”. David Vázquez aprovechaba igualmente la presencia de EL FARO para “agradecer públicamente la presencia del Presidente de la Agrupación, D. David Merino Padial, las representaciones de las hermandades y cofradías que nos han acompañado y a todos los parroquianos que han acudido a la llamada de la hermandad”. Finalmente, hacía un recordatorio de “los días importantes que tenemos fechados próximamente, como es el de la mesa redonda que tendrá lugar en la tarde del viernes, 21 de febrero, bajo el título de “Diez años de fe y Amor”, en conmemoración del X aniversario de la aprobación de los estatutos de la hermandad y, como no, esa fecha central que va a ser la del día 8 de marzo con nuestro Cristo de la Fe presidiendo el solemne y piadoso viacrucis de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Motril”. Por su parte, el Presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías, D. David Merino Padial, exponía que la llegada de esta nueva imagen “supone un paso de gigantes, no solo para la hermandad, sino también para todo Motril, que ha conseguido otra escultura más y ha engrandecido su patrimonio artístico. Poco a poco la Santa Cena está completando un misterio que va a resultar asombroso y que una vez que se ponga en la calle sin duda va a ser impresionante”. Finalmente, el propio escultor, D. Ángel Asenjo, exponía a esta redacción que el acto de la bendición de hoy “supone ir finalizando un proyecto grande en el que son muchas las figuras integrantes que parece que nunca se le iba a ver el fin. Afortunadamente, ya se le van descontando figuras y solo quedarían tres para completar el conjunto escultórico”. El imaginero recibía en ese momento la felicitación de EL FARO por la grandeza que muestra ya el pasaje bíblico de la Cena del Señor en su conjunto, afirmando a esta redacción “que es un honor para mí tener una obra así en Motril, en el que se ve la evolución de los primeros apóstoles a los últimos ya que han pasado varios años y se puede apreciar la evolución del propio artista y la de las figuras que evolucionan por si solas con el paso del tiempo, el contacto del aire y los años”.

En el acto y en la propia ermita, la junta de gobierno de la hermandad de la Santa Cena recibía igualmente las felicitaciones de los fieles y vecinos del barrio, que no dudaron en posar junto a la imagen para perpetuar el hito histórico de su llegada a Motril. La actividad de la hermandad no quedaba clausurada aquí, pues al día siguiente había convocado una jornada de convivencia en los salones parroquiales que iba a estar destinada a la recaudación de fondos para costear la imagen del Apóstol Santo Tomás, que es la próxima a concluir por el escultor.