SOBRE LOS NUCLEOS DE POBLACION DE MOTRIL Y EL MODELO DE CIUDAD
El Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) incluye entre las publicaciones de su página Web una amplia documentación numérica sobre cada uno de los municipios andaluces. En relación con los datos incluidos sobre Motril destacan los correspondientes a la población de cada uno de los núcleos de población de este municipio en 2022, datos procedentes del Padrón Municipal de Población.
La población total de casi 58.800 habitantes de Motril en 2022 se distribuye entre diez núcleos de población (ver cuadro adjunto). El mayor núcleo es el de Motril, con 48.717 habitantes y el menor es el de La Chucha, núcleo ubicado en el llano de Carchuna, con solo 57 habitantes. El segundo núcleo es el de El Varadero, junto al puerto de Motril, con 3.399 habitantes. Los cuatro núcleos situados en el llano de Carchuna (Carchuna, Calahonda, La Perla de Andalucía y La Chucha) suman algo más de 4.000 habitantes. La gestión municipal de dichos núcleos corresponde a la ELA de Carchuna-Calahonda, administración que tiene amplias competencias en materia de gestión de los servicios públicos.
Todo indica que en los próximos años será el núcleo de Playa Granada el que registre un mayor aumento de población, a la vista del importante volumen de nueva construcción residencial que está teniendo lugar en el mismo. Una proporción importante de las nuevas viviendas que están en construcción y de las que está previsto construir serán viviendas de temporada, utilizadas como máximo unos dos meses cada año. En el verano de 2023 han sido abundantes los atascos de tráfico en el citado núcleo de población, lo que indica que, en el ayuntamiento de Motril, que es el que concede las licencias, deberá tenerse en cuenta la necesidad de reforzar las infraestructuras actuales, que son las correspondientes a un núcleo de población con bastantes menos habitantes que los que puede haber dentro de no mucho tiempo, a la vista de la intensidad con la que se construyen las nuevas viviendas.
En las proximidades del paseo marítimo se va a crear un lago interior o marina seca alrededor del cual está prevista la construcción de un número más que elevado de nuevas viviendas, incluidos bloques de pisos. Habrá amarres para embarcaciones deportivas, circunstancia que se emplea para justificar la creación del lago interior citado, cuya agua procederá del mar, para lo cual se construirán los correspondientes espigones. Llama la atención la disponibilidad de inversiones publicas para facilitar el desarrollo inmobiliario, que contrasta con la lentitud con la que marchan los recursos públicos disponibles para la construcción de las canalizaciones de la presa de Rules, cuyas aguas son tan necesarias para la población y la agricultura de casi toda la Costa de Granada.
“España tal y como conocemos nace de la revolución franquista. No solo cambió el poder político, sino la propiedad inmobiliaria o la estructura social. La idea de revolución es importante para entender que nuestro modelo económico parte del desarrollismo, donde el turismo y la construcción son elementos fundamentales en la captación de capitales y la distribución de las plusvalías. Es nuestro petróleo. Cuando en la sociedad digital de 2020 se especulaba con el cambio de modelo productivo, no se tenía en cuenta que hablamos de un país adicto. No parará hasta que no quede un metro cuadrado de costa por edificar. Y, claro, a este último metro cuadrado tendrá que llegar una carretera…. Todo puede ser turístico. El trabajo es sustituido por la producción sin horarios ni espacios concretos” (Jorge Dioni López, “El malestar de las ciudades”, Arpa, 2023).
En el futuro que se avecina Motril será una ciudad en la que destacarán los espectaculares “pelotazos” inmobiliarios que van a tener lugar, circunstancia que no afectará de forma positiva para la población de Motril y que enriquecerá a los promotores. El empleo que se va a crear será poco más que el ligado a la construcción de los nuevos edificios de viviendas. Ninguna de las principales fuerzas políticas ha presentado alternativas urbanísticas al modelo, a todas luces desarrollista, de la actual mayoría de gobierno local.
Está por ver si puede venderse tanta vivienda como se va a construir en Motril. El momento actual es de amplias incertidumbres económicas, acrecentadas por el evidente calentamiento global, que tanto daño ha hecho en las dos últimas cosechas a la producción de frutos subtropicales. Dicho calentamiento puede diezmar buena parte de la agricultura en España y que también puede dar lugar a amplios cambios en los flujos turísticos.
Julio Rodríguez López es Vocal del Consejo Superior de Estadística del INE. Fue Consejero de Economía e Industria de la Junta de Andalucía y presidente del Banco Hipotecario de España y de la Caja de Ahorros de Granada.