Domingo A. López Fernández
Cronista Oficial de la Ciudad de Motril
Fotos: EL FARO
El Teatro Calderón acoge la ceremonia institucional que ennoblece a personas, empresas y colectivos de la ciudad
Fiel a su cita anual, el pasado sábado, 3 de junio, el Teatro Calderón acogía el acto institucional de la entrega de los honores y distinciones que la corporación municipal ha tenido a bien conceder a personas, empresas y colectivos en este año de 2023. La fecha no es baladí, ni mucho menos casual, pues la institución municipal manifiesta públicamente su gratitud por la facultad real de Felipe IV, que en el año de 1657 concedía a Motril el título de ciudad y le confería el privilegio de poder usar sus armas y dosel en su escudo representativo, además de separarle del corregimiento de Granada. Precisamente, este recordatorio se hacía muy palpable en el propio escenario del teatro, donde no existían galas ni adornos extraordinarios, tan solo el escudo bordado de la ciudad entre las bambalinas, dejando ver el castillo almenado con las dos banderas que le son características y la orla con la leyenda de “Muy Noble y Leal ciudad de Motril”. En su centro, la otra inscripción latina que señala su origen: “Civitas Sexis For Mensis SP”.
El acto protocolario para la entrega de los honores y distinciones había quedado fijado para las 20:00 hrs, significándose, desde minutos antes, la trascendencia e importancia del mismo, pues en la plaza que da acceso al teatro se hacían presentes numerosas personas afectas a instituciones civiles y militares y la propia ciudadanía, al margen de familiares y amigos de los galardonados que mostraban su satisfacción personal por sus respectivo reconocimientos.
Tras los preceptivos minutos de cortesía, daba principio el acto institucional con la intervención del presentador del mismo, el conocido locutor de radio Pedro Feixas, que ofrecía la bienvenida a todos los asistentes, al tiempo que reconocía que “Motril rinde homenaje a los suyos” en este día. De seguida, daba paso a la intervención musical que protagonizaba el grupo motrileño “Piazzolla”, que ofrecía a los presentes una pieza del compositor Camille Saint-Saëns.
Paralelamente, sobre el escenario, se halla dispuesto protocolariamente el orden de autoridades y el propio de los galardonados. En la mesa presidencial ocupaba su lugar la alcaldesa de la ciudad, Luisa Mª García Chamorro, el primer teniente de alcalde, Antonio Escámez, y el presidente de la Comisión Instructora de los procedimiento de concesión de honores y distinciones, Nicolás Navarro. A su derecha, las personas e instituciones que van a ser distinguidas con sus nombramientos y, a la izquierda, los representantes de los distintos grupos políticos que han de entregar dichos galardones. Las palabras del presentador son bastante clarificadoras del significado del acto, pues en este día afirma que se reconoce “el ejemplo de personas e instituciones en su diario caminar en pro de nuestra ciudad y que ya han escrito con letras de oro su nombre en la historia de Motril”.
Tras su intervención accedía al atril la alcaldesa de la ciudad, para iniciar su discurso recordando esa fecha clave del 366 aniversario de la concesión del título de ciudad a Motril, a la que calificó de “tierra amable, amiga y de acogida”. Como bien dijo, en este día, “reconocemos a muchas personas, entidades y colectivos que a través de su espíritu emprendedor, su pasión, su tesón y su trabajo, continúan dándole a este título de ciudad un significado aún mayor”. Tras mencionar a los galardonados uno por uno y sus respectivos reconocimientos, Luisa Mª García Chamorro exponía ante todos los presentes que eran merecedores “del recuerdo y la memoria del patrimonio local de esta ciudad que les estará eternamente agradecida”. Y, finalmente, culminaba su discurso afirmando que “a partir de hoy sois parte de nuestro imaginario colectivo que trascenderá por siempre a lo largo de los años y que hoy nos recuerda que merece la pena luchar y esforzarse por esta bonita ciudad”.
Tras la intervención de la alcaldesaciudad, da comienzo la entrega de las primeras distinciones, seis en total que vinculan a los galardonados con una placa dedicada a determinados espacios públicos. La primera distinción se confiere a quien fuera notario de Motril, D. José Manuel Misas Barbas, al que se considera “padre del atletismo popular motrileño” y a quien cariñosamente sus compañeros le llamaban “El Maestro”. José Manuel Misas Barbas llegaba a Motril en 1988 para ejercer su profesión de notario y, animado por su afición deportiva, fundará el “Club Pazito a Pazito”, asociación deportiva a la que se atribuye el santo y seña del deporte en Motril. La distinción se le confiere a petición de sus propios compañeros y familia, otorgándole su nombre al puente de madera construido a la altura del Puente del Santo en Playa Granada, dado que ejerciendo su actividad deportiva siempre transitaba por él.
La segunda distinción es dedicada al arquitecto motrileño Pedro Puertas Herrera, fallecido en Motril el día 26 de julio de 2021. Pedro Puertas dedico su vida a su amada profesión, que compaginó con su afición a los deportes, muy particularmente los náuticos, que pudo practicar en la playa de Calahonda. Su gran obra en Motril fue el diseño y construcción de SkyPark ubicado en el Parque de los Pueblos de América, considerado por muchos como el mejor de Europa y que incluso ha sido copiado en diversos lugares del planeta. En este SkyPark se pueden practicar deportes con patines, monopatines y bicicletas y desde este día, una placa conmemorativa llevará su nombre en esta señera instalación deportiva de la ciudad.
La tercera distinción es para José Baena Terrón, conocido comerciante de la ciudad que en sus ratos libres se dedicaba a la pintura artística, su verdadera afición. En su domicilio particular tenía su estudio, que convirtió en un animado centro cultural en el que se celebraban tertulias literarias, actuaciones teatrales y animados debates de artistas locales. Motril y el mar fue su centro de inspiración, con un estilo muy particular e inimitable, en el que siempre destacaban las pinceladas irónicas, transgresoras y mordaces. En Motril expuso su obra en numerosas ocasiones, siendo la última la celebrada el día 19 de mayo de 2008. En base a su trayectoria artística, la institución municipal ha acordado que la Sala de Exposiciones del Museo de Historia lleve para siempre su nombre con el fin de perpetuar su legado y que su obra permanezca siempre viva.
La cuarta distinción se otorgaba a la escritora Almudena Grandes, fallecida en noviembre de 2022 en Madrid. Poseedora de la medalla de oro al mérito de las Bellas Artes, Almudena Grandes es una autora bastante conocida, no solo por sus libros, sino también por erigirse en analista y articulista de la realidad social de España, siendo una de las más importantes figuras literaria de nuestro siglo. En 1988 ganó el premio “La Sonrisa Vertical” con su obra “Las Edades de Lulú” y siempre ha gozado del apoyo de los lectores, a los que se ha mostrado sin tapujos en su incansable lucha por la igualdad. En base a su prolífica obra, el ayuntamiento de la ciudad ha acordado que a partir de este día se le dé su nombre al espacio público de la Biblioteca de La Palma.
La quinta distinción está dedicada a la motrileña Rocío López Díaz, exponente en la ciudad del deporte del fútbol sala. Comenzó a practicar esta modalidad deportiva con cuatro años, fichando cuando tiene 13 años de edad por el Motril Club de Fútbol. A los 15 debuta en primera división de fútbol sala con el club de Atarfe y, a partir de aquí, comenzará a ser convocada con las selecciones provinciales y andaluzas, tanto de fútbol sala como de fútbol en sí. En esta modalidad ganará el campeonato de España, fichando por el Sevilla F.C. en el año 2004, llegando a entrenar con la selección española de fútbol femenino. Rocío López fichará igualmente por el UCAM Murcia, ciudad en la que alterna su actividad con el estudio del grado de Fisioterapia, carrera que actualmente ejerce en nuestra ciudad. Posteriormente, requerida por el Fútbol Club Barcelona, ganará la copa de la Reina en el año 2011. Finalmente, tras alcanzar el ascenso a primera división con el Levante, se retira de los campos de fútbol. Por esta singular trayectoria, la institución municipal ha acordado que el campo de fútbol de Puntalón lleve a partir de ahora el nombre de Rocío López Díaz.
Finalizaba la sexta distinción con el otorgamiento al cuerpo de la Policía Nacional de Motril del espacio público de la Fuente situada en la avenida de Salobreña, concretamente a la altura de la calle Aguas del Hospital, que a partir de ahora llevará su nombre. Se concede este honor en base al trabajo, sacrificio y dedicación del cuerpo en calidad de valedores de los principios de dignidad, entrega y lealtad a la sociedad motrileña. Con este nombramiento, por parte de la institución municipal se pretende perpetuar el nombre del Cuerpo de la Policía Nacional de Motril en la memoria colectiva de la ciudad.
Dando continuación al protocolo de los Honores y Distinciones, se entregan a continuación dos nombramientos, el primero de ellos a Paulino Martínez Moré como Cronista Oficial Grafico de la Ciudad de Motril. Paulino Martínez ha sido un motrileño de pro cuya vida ha transcurrido con bastante éxito en las actividades en las que ha podido participar. Fue el primer presentador de la Televisión Local de Motril, se ha ejercitado en carreras automovilísticas, ha sido gerente del Patronato de Turismo durante 16 años, entre otras muchas más, aunque por encima de todo hay que señalar que ha practicado de forma altruista su afición a la fotografía. En esta labor ha tenido, incluso, reconocimientos internacionales, y sus fotografías ilustran folletos, libros, publicaciones nacionales e internacionales y periódicos de talla como puede ser el New York Times. En base a esa dedicación a la fotografía en la que se ha constituido como fedatario público de la historia reciente de la ciudad, a partir de este día Paulino Martínez Moré ejercerá por decisión municipal el título de Cronista Oficial Gráfico de la ciudad.
El siguiente nombramiento conferido por la institución municipal ha sido el de Hijo Adoptivo de la ciudad a Antonio Peralta Gámez, persona dedicada en cuerpo y alma a la enseñanza de la música en nuestra ciudad. Antonio Peralta llegaba a Motril en el año de 1973 para formar parte del equipo docente del colegio Reina Fabiola, desde donde va a fomentar el estudio de la disciplina musical como una de las grandes facetas de la vida. Ha sido, igualmente, el gran impulsor de la asociación de Juventudes Musicales con el fin preclaro de poner a disposición de los motrileños la difusión y estudio de la música clásica. En su labor y trayectoria, se hizo acreedor de la Medalla de Oro de la Federación Territorial de Juventudes Musicales de Andalucía, consiguiendo, igualmente, que se reconociera a Motril el grado elemental al Centro de Música de Juventudes Musicales. Desde este día, este conocido docente de la ciudad ostenta por decisión municipal el título de Hijo adoptivo de la ciudad de Motril.
Finalmente, son tres las distinciones que se entregan en la modalidad de medallas de oro de la ciudad. La primera de ellas se otorga a la empresa Cooperativa Motrileña de de Transportes (COMOTRANS), fundada en el año de 1972 por un grupo de 34 emprendedores que se juntaron para dar servicio logístico a la comarca. Fue todo un logro, pues Motril tiene una ubicación estratégica para la logística internacional terrestre y marítima por ser la puerta de entrada a Europa del continente africano. Con más de 50 años de actividad cuenta con una flota de más de 200 vehículos equipados con las últimas tecnologías que cubren el 99% del territorio español y ligan a 28 países de Europa, superando con ello los 10.000 potenciales clientes. COMOTRANS es una empresa pionera en el sector del transporte de mercancías y, por ello, por decisión municipal, se ha hecho acreedora a la medalla de oro de la ciudad.
La segunda medalla de oro de la ciudad se otorga a título póstumo al conocido agricultor motrileño Miguel del Pino Palomares. Ha sido, sin duda, un referente del sector agrícola en la costa granadina, con una visión revolucionaria de la agricultura. Con su trabajo saneó e impulsó una pequeña cooperativa agraria, La Palma, en lo que es hoy, una empresa líder mundial en un producto estrella, el tomate “cherry”. Fue presidente de la Palma durante los años de 1983 y 2006, cargo que le sirvió para impulsarla desde el punto de vista empresarial, mejorando la calidad de vida de los agricultores y buscando nuevos mercados para los productos hortícolas de la costa. Desde luego, La Palma, ha sido un modelo de prestigio reconocido por todo el mundo cooperativista en el sector agroalimentario. Por ello, la institución municipal, ha decidido otorgar la medalla de oro de la ciudad a título póstumo a este hombre de bien que ha dado fama y prestigio a los productos agrícolas de la costa granadina.
Finalmente, concluye el protocolo de actuación del día con la entrega de la medalla de oro de la ciudad al actual presidente de La Palma, Pedro Ruiz García. Fue elegido para este cargo en el año de 2006, tras la jubilación del anteriormente galardonado, Miguel del Pino, con el reto de ampliar y modernizar las instalaciones y adaptarlas a los cambios y exigencias que requieren los mercados. El homenajeado nació en la localidad granadina de Játar, y es ingeniero técnico industrial. Ingresó como agricultor en La Palma en el año de 1992 y en el año 2000 comienza a ejercer como ingeniero técnico asesorando a los agricultores en sus fincas agrícolas a pie de campo. Ha renovado su mandato presidencial en cinco ocasiones, labor que le ha gratificado al situar a la empresa como sociedad modélica a nivel nacional e internacional. Por este y otros méritos, entre ellos el de introducir en el año de 2022 el proyecto “amela”, que confiere a esta variedad de tomate como la mejor del mundo, Pedro Ruiz García se ha hecho merecedor de la medalla de oro de la ciudad de 2023.
Con esta intervención final, se daba por concluido el acto de la entrega de los honores y distinciones de la ciudad de Motril en el año de 2023, dejando paso a las múltiples felicitaciones a los galardonados por parte de familiares, amigos y público presente. Tras ello, y en un ambiente distendido, se dio paso a las incesantes fotografías individuales y de grupo que a partir de ahora constituyen un reconocimiento más a quienes forman ya parte de la galería de personajes que dan nombre y prestigio a la ciudad de Motril.