¡¡¡Pedrooooooo…!!!
Frente al lamentable espectáculo en el que algunos están convirtiendo el proceso electoral que desembocará el próximo día 28 con la elección de los nuevos concejales y concejalas en nuestros ayuntamientos, la Universidad de Granada ha desarrollado una ejemplar campaña que concluyó antes de ayer martes, con la elección de Pedro Mercado, como nuevo Rector de la UGR para los próximos seis años.
Cualquiera de los tres candidatos tenía por delante una tarea titánica, como es la de estar a la altura del legado que reciben de Pilar Aranda, una Rectora Magnífica, que además ha demostrado ser una Magnífica Rectora. Tanto Paqui López Torrecillas, como Pedro Antonio García y Pedro Mercado, valoraron durante la campaña muy positivamente los ocho años de gestión de la Rectora saliente, algunos de los cuales ha compartido en su equipo con su ahora sucesor.
Conseguir la victoria, como ha hecho el nuevo Rector, en primera vuelta y con más de un 53 por ciento del voto ponderado es una excelente noticia, porque demuestra que los planteamientos de Pedro Mercado, han calado en una muy amplia mayoría de la comunidad universitaria y eso es muy importante para la confianza del equipo que tiene ante sí la responsabilidad de llevar a nuestra Universidad a las puertas de su V Centenario y de gestionarla en un periodo apasionante, por los retos que se le abren a la propia institución universitaria, pero también al territorio sobre el que asienta.
Aunque siempre hemos hablado de que Granada no se entendería sin nuestra universidad, no es menos cierto que hasta no hace tanto, acusábamos a nuestra «alma máter» de vivir de espaldas a las necesidades de Granada, más atenta a sus claves endogámicas internas que a las demandas sociales de su entorno. Sin embargo, ese escenario ha cambiado radicalmente en los últimos ocho años, durante los cuales y a pesar de las enormes dificultades, financieras y pandémicas, a las que ha tenido que enfrentarse Pilar Aranda, la Rectora ha sido capaz de situar a la UGR en el centro de cualquier proyecto ilusionante y de futuro para Granada y su provincia y lo ha hecho además desde la cada vez mayor autoridad científica, innovadora e investigadora y del espíritu de consenso y acuerdo que ha sido capaz de tejer con instituciones y partidos. Mantener, y si se puede incrementar, ese «espíritu Aranda», será uno de los principales retos del nuevo Rector, cosa que no dudo que va a conseguir, dado su talante y trayectoria.
Que nadie olvide que nuestra Universidad es tan importante para Granada como lo pueda ser su Ayuntamiento, así lo acreditan sus más de 560 millones anuales de presupuesto, sus 130 inmuebles repartidos en varios campus, sus casi 8.000 trabajadores entre profesores y personal de administración y servicios, sus más de 64.000 alumnos y su más del 6,2% de peso en el PIB granadino.
Pedro Mercado, va a tener la enorme responsabilidad de dirigir una de las mejores universidades de España y el mundo, lo cual ya es mucho decir. Una institución que además reviste una importancia capital para la ciudad en la que reside, porque tanto en cantidad, como en calidad, el peso específico de la UGR para el territorio en el que se asienta es mucho mayor que el que representan otras universidades en sus ciudades; recibe una institución que en los últimos ocho años se ha consolidado como un referente académico, docente e investigador de primer nivel nacional e internacional y que ha mejorado notablemente sus infraestructuras y sobre todo su financiación, después de años de recibir mucho menos de lo que le correspondía.
El nuevo Rector tendrá que seguir liderando iniciativas y sumando voluntades en proyectos fundamentales para nuestro futuro como el de la Inteligencia Artificial, el IMf Dones, o la recuperación del complejo de la azucarera San Isidro.
Pedro Mercado recibe una universidad situada entre las 200 mejores del mundo según los rankings más solventes, con algunas de sus facultades y profesores en la Champions League de la innovación y la investigación, una de las más atractivas para el estudiantado internacional, como lo acredita que sea la más solicitada en el programa Erasmus y enormemente querida y apreciada por la sociedad de la que se nutre, a la que forma y a la que sirve.
Mis mejores deseos para el nuevo Rector y su equipo, porque sus aciertos repercutirán no solo en la institución que tiene la responsabilidad de gobernar, sino también en toda nuestra ciudad y provincia.
Estoy seguro que si Penélope Cruz hubiera estado en el escrutinio electoral del pasado martes, también habría gritado aquello de: «¡¡¡Pedrooooooo!!!, como hiciera en aquella memorable gala de los Óscar del 26 de marzo de 2000, cuando consiguió la preciada estatuilla dorada el gran Pedro Almodóvar.
¡Enhorabuena Rector!