EL FARO
La formación andalucista censura que no ha habido acuerdo entre la empresa y la parte social, pese a la disposición de los trabajadores. Además de la plantilla formada por casi 300 personas, la interrupción de actividad afecta a las empresas auxiliares y al Puerto de Motril
Andalucía Por Sí ha apoyado este lunes a la plantilla de Torras Papel en la concentración convocada por el comité de empresa de la factoría motrileña para censurar la forma arbitraria en la que la empresa del grupo Lecta, está aplicando el ERTE que aprobó para este año que afecta a 295 empleados de la localidad, así como para otros cuatro centros de trabajo en España: Zaragoza, Leitza (Navarra), Sant Joan Les Fonts (Girona), Almazán (Soria), sumando 1.430 empleos.
La formación andalucista ha afirmado que además de los puestos de trabajo que se ven afectados de forma directa por la interrupción del trabajo -en lo que va de año, una semana al mes- , el cese de la actividad durante siete días, interrumpe además el trabajo de empresas auxiliares como el centro especial de empleo de Aprosmo que fabrica los palés de almacenamiento de la producción, las empresas de transporte y el propio Puerto.
Los trabajadores se han concentrado este mediodía en la plaza de la Aurora con una amplio respaldo de la sociedad motrileña y representantes políticos y de instituciones.
El ERTE supone además una merma importante en las nóminas de los trabajadores de la principal industria que tiene la comarca, con una economía basada en la agricultura y su transformación. Así, los representantes de los trabajadores han comentado a los medios de comunicación que aún no han percibido el ingreso del ‘paro’ del mes de enero, ni el de febrero. AxSí ha criticado que no haya habido acuerdo entre la empresa y la parte social, pese a la disposición de los trabajadores, desde un primer momento para que la situación fuera lo menos lesiva.
Por último, Andalucía Por Sí, ha lamentado que el grupo empresarial haya justificado el ERTE en la reducción del número de pedidos debido al aumento de los precios y del coste del gas natural, «ya que la factoría motrileña tiene una planta de cogeneración que suministra la electricidad necesaria para la producción interna y exportar a la red el excedente».
