Domingo A. López Fernández
-Cronista Oficial de la ciudad de Motril-
Fotos: EL FARO
La hermandad del Gran Poder engrandece el patrimonio artístico y religioso de las Madres Agustinas Nazarenas
Jornada solemne la vivida en la tarde del sábado, 18 de febrero, en la iglesia de la Visitación de Nuestra Señora, donde tenía lugar la bendición de la nueva titular mariana de la hermandad de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, María Santísima del Mayor Dolor, que es obra del escultor veleño Israel Cornejo Sánchez. Solemne, cercana y, desde luego, devota, pues el pueblo ha sabido responder a un acto religioso con lo que queda a su mano, su siempre estimada presencia, su fe, y la querencia particular que ofrece a la comunidad de Madres Agustinas Nazarenas, custodias, a partir de hoy, de la imagen bendecida. Con la lógica expectación que promueven este tipo de actos, la hermandad del Gran Poder había cursado las preceptivas invitaciones a autoridades, cofradías, hermandades y vecinos del barrio y de la ciudad para que arropasen a las religiosas en este sagrado ceremonial que viene a entronizar en su iglesia a una nueva imagen de María bajo la advocación del Mayor Dolor y engrandecer el patrimonio artístico y devocional de la comunidad, así como el propio de la hermandad que radica en su templo. La realidad del día fue que el acto superó todas las expectativas planteadas por la junta de gobierno de la corporación cofrade, ya que la iglesia de la Visitación abrió sus puertas a las 19:00 hrs de la tarde y ya había congregado un numeroso público en la calle ansioso de ocupar sus bancos dado el reducido espacio que presenta el templo. En verdad, las previsiones quedaron desbordadas, pues aunque se habilitaron sillas junto a los bancos, los pasillos quedaron repletos de fieles que hubieron de seguir el ceremonial de pie. Y no hablemos del pórtico, donde hubo congregado un numeroso público que siguió el acto a través de las redes sociales que retrasmitieron en directo el acto.
La nueva imagen mariana de la hermandad llegaba a Motril en la noche del martes, 14 de febrero, desde Vélez Málaga, localidad hasta la que se había desplazado una comisión de la junta de gobierno para efectuar el traslado. En la misma puerta del convento, concretamente junto al torno, la imagen era desprovista del velo que ocultaba su rostro y, al momento, con un gran sentimiento, la comunidad de religiosas le dedicaba una sentida salve de bienvenida. De ahí, María Santísima del Mayor Dolor pasaba a la sala capitular, donde ha permanecido expuesta a la devoción de las monjas y sus oraciones.
El sábado, en la mañana, miembros de la hermandad procedían a erigir su altar de cultos en el brazo izquierdo del crucero, labor que ha contado con la colaboración de varias hermandades locales. En concreto, el dosel ha sido cedido por la hermandad de la Vera Cruz, la silla de trono lo ha hecho la hermandad del Señor de la Humildad en el Huerto de los Olivos, la media luna a los pies de la Virgen y los candelabros pertenecen a la cofradía del Perdón y María Santísima de la Misericordia, así como los propios del Santo Sepulcro, y el manto de luto que exhibe la Virgen ha sido cedido por la cofradía de “Los Vigías y María Santísima del Mayor Dolor” de Vélez Málaga. Con todo prevenido, la imagen ha sido vestida con solemnidad por el propio imaginero portando sobre sus sienes una corona de flores blancas para representar simbólicamente el acto de su entronización en la iglesia, al igual que lo hacen las Madres Agustinas Recoletas Nazarenas en la toma de sus hábitos.
Ya en la tarde, la expectación generada en los fieles ha sido excepcional, pues desde la apertura de las puertas de la iglesia una auténtica marea humana se ha postrado a los pies de la Virgen para entonar sus rezos y plasmar su rostro en fotografías de la que ya es una jornada histórica para Motril.
La santa misa de bendición de la imagen tenía previsto su inicio a las 19:30 hrs, aunque dada la espectacular acogida de los fieles ha tenido que demorarse por un tiempo prudencial. En lugares preferenciales se han ubicado el hermano mayor de la hermandad, José Molina Pérez, el escultor, Israel Cornejo Sánchez, el presidente de la Agrupación de Cofradías y Hermandades de Motril, Manuel Terrón González y el motrileño Antonio Hernández Camacho, colaborador en el taller del imaginero. Junto a ellos se han situado los padrinos del acto de bendición, la amplia representación del equipo de gobierno local y la práctica totalidad de hermanos mayores del resto de corporaciones penitenciales y de gloria provistos de sus medallas corporativas.
Previo al inicio de la santa misa, el hermano mayor de la hermandad del Gran Poder daba la bienvenida a todos para exponer que en su sede canónica “esta tarde llenos de gozo y de alegría vamos a ofrecerle al señor la imagen de María bajo la advocación de María Santísima del Mayor Dolor. María fue una persona que vivió profundamente la pascua del señor y por ello esta Virgen que hoy se bendice siempre será signo de lo grande y profunda que es la relación de la Virgen Santísima con Cristo y su iglesia, siendo la Virgen María, madre de Cristo, imagen modelo y espejo de la iglesia ya que en ella se conoce el camino y la norma para llegar a la plena unión con Cristo”.
La sagrada eucaristía ha sido presidida por el padre consiliario de la hermandad, D. Alberto Sedano Rodríguez, en unión del capellán de las Madres Nazarenas, Padre Bonifacio Díez Pérez. En su homilía, el oficiante ha puesto de manifiesto los contenidos de las lecturas sagradas y el modelo de santidad en el templo de Dios, destacando que la base de esa santidad es el amor reunido en torno a la Virgen María que supo amar hasta al final al pie de la cruz en el momento de su mayor dolor. La santa misa ha sido amenizada con la participación de la coral “Armiz” que dirige Chelo Martos y que ha seleccionado un cuidado repertorio de cantos sagrados que ha iniciado con el “Himno de la Misericordia” de Paul Inwood, el canto gregoriano del “Kyrie Eleison” de Gounod y el “Gloria del mismo autor”.
Tras la liturgia de la palabra ha tenido lugar el rito de la bendición de la imagen, momento en el que el sacerdote ha incensado la imagen, a la vez que la Coral Armiz interpretaba magistralmente el cántico “Tu Madre nos acoges”, original de Marco Frisina. Al tiempo, dos representantes de la comunidad de religiosas, concretamente la priora, Madre María Ángeles y la Madre María Teresa, han procedido a colocar sobre las sienes de la Virgen la corona de reina gloriosa.
Posteriormente, por parte de Francisco José López Morales, capataz del paso de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, se ha dado cumplimiento al acuerdo tomado en junta de gobierno del nombramiento de padrinos de luz, rito que han protagonizado Dª Mari Carmen Artillo Moya y familia, el hermano de hermandad Jesús Ortega Fernández, la Real y Muy Antigua Hermandad de Nuestra Señora de las Angustias, rito que ha protagonizado su hermano Mayor, Antonio Manuel García Ruiz y la corporación hermanada de Nuestro Padre Jesús en su Triunfal Entrada en Jerusalén, acto que ha sido llevado a cabo por su hermano mayor, Juan José Sánchez Callejas.
Seguidamente, por parte del secretario de la hermandad, Alejandro Urquizar, se ha procedido a la lectura del acta de la bendición que recoge todos los pormenores y actuaciones que se han llevado a cabo, procediendo de inmediato a su firma, que han refrendado el hermano mayor, el padre consiliario de la hermandad, el secretario de la misma y las RR.MM. Nazarenas, acto que ha sido gratificado con un largo y sonoro aplauso por parte de los fieles presente.
Han tenido lugar, igualmente, los agradecimientos que la hermandad de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder ha dedicado a la coral Armiz por su participación en la santa misa, y al escultor, Israel Cornejo, quien desde el ambón ha dedicado unas palabras a los fieles para reconocer con agrado la confianza depositada por la hermandad para encargarle la imagen de María Santísima del Mayor Dolor. Asimismo, ha habido reconocimiento a las cofradías que han colaborado en el acto de la bendición, a los padrinos del ceremonial y a los sacerdotes celebrantes. A todos ellos se les ha hecho entrega de un cuadro conmemorativo que plasma en una fotografía el rostro de la imagen de la Virgen nada más ser concluida.
Con el canto final de la “Salve Regina” y el canto del “Magnificat” se ha dado por concluida la misa de bendición de la nueva imagen de María Santísima del Mayor Dolor, procediéndose de inmediato a las felicitaciones de rigor a la junta de gobierno de la hermandad del Gran Poder, al escultor, padrinos del rito y a las Madres Nazarenas.
Ciertamente ha sido un acto grandioso que ha gratificado el pueblo de Motril con su presencia, tal y como ha referido el consiliario de la hermandad, D. Alberto Sedano, quien a la conclusión de la misa ha dedicado unas breves palabras a EL FARO para trasmitir las sensaciones percibidas en el acto. Según expresó a la redacción, “cuando he visto el templo repleto de fieles me recordaba cuando había una fiesta grande de una madre en la casa, a la que acuden todos los hijos con cariño, con regalos, con devoción, y eso es lo que veía que la Virgen es Madre de todos, Madre de Dios y verlos congregados en torno a ella me emociona el sentir que la Virgen sigue siendo protectora, abogada e intercesora de todos nosotros. Por tanto, verla en ese valle de lágrimas nos recuerda a nosotros los cristianos que el sufrimiento está acompañado también por sus lágrimas y por su protección de Madre y eso a mí me reconforta mucho porque tengo mucha devoción a la Virgen y, desde luego, me emociona ver como la ciudad sigue siendo mariana por los cuatro costados”.
Igualmente, Israel Cornejo, autor de la nueva imagen de María Santísima del Mayor Dolor, refería a EL FARO, sus propias características artísticas. Según nos expresaba, su obra se encuentra inspirada en la “escuela barroca andaluza y sigue los cánones ya ensayados por Domingo Sánchez Mesa en el rostro del Señor del Gran Poder. De tamaño real, mide 1,70 de alto y está realizada en madera de cedro en cabeza y manos y pino para el torso y candelero. Está policromada al óleo con pátina final con postizos para dar mayor realismo a la Dolorosa que marca su pose como queriendo buscar a su Hijo. Está peinada con raya central y recogido el pelo en un moño cordobés con una peina de carey. Asimismo, cuello anatomizado, al igual que ambas orejas y ojos de cristal policromados artesanalmente en tonos marrones. Por lo que respecta a las pestañas, son de pelo natural, y muestra siete lágrimas en referencia a los siete dolores de la virgen”.
Una obra, pues a admirar por el pueblo cristiano, que en este año de 2023 va a poder contemplar por primera vez en su paso por las calles motrileñas en esa señera procesión de la que ya es madrugada del jueves santo.