Domingo, 20 de noviembre de 2022
Antonio Gómez Romera
EN EL 20 ANIVERSARIO DEL RODAJE DEL DOCUMENTAL “LA SILLA DE FERNANDO”, protagonizado por FERNANDO FERNÁN GÓMEZ
Hoy se cumplen 20 años (miércoles, 2002), del inicio del rodaje en Algete (Madrid) del documental cinematográfico “La silla de Fernando”, con guion y dirección de Luis Alegre Saz (Lechago, Teruel, 11 enero 1962) y David Rodríguez Trueba (Madrid, 10 septiembre 1969).
Sobre el Documental “La silla de Fernando”
Según refiere el mencionado David Rodríguez Trueba, polifacético personaje de nuestra España actual en la que ha destacado como escritor, periodista, director de cine, guionista e, incluso, actor, “Sólo unos pocos privilegiados, conocen hasta qué punto Fernando Fernán Gómez, sentado en una silla, es capaz de convertir una charla… en algo más que una charla… (…) era el mejor conversador que he conocido nunca, una persona que le da la vuelta a cualquier argumento (…) de una inteligencia que está a años luz de otros que conozco, un personaje inigualable en el siglo XX. Esta película aspira a que esos privilegiados no sean tan pocos”.
El rodaje de ésta “película-conversación”, se finaliza el jueves, 20 enero 2005 y según refería su director, “algunos días las sesiones eran de 11 a 14 horas y otros de 17 a 20. Emma Cohen siempre andaba por allí, como una cómplice perfecta”. Tiene una duración de 89 minutos y es estrenado el miércoles, 29 noviembre 2006, en cines de Madrid (“Princesa”) y Barcelona (“Renoir Floridablanca”).
David Trueba y Luis Alegre, coinciden con Fernando en la Nochevieja de 1990, hacia las 3 de la madrugada, de la mano del actor sevillano Juan Diego (Bormujos, 14 diciembre 1942 – Madrid, 28 abril 2022): El mismo David Trueba reconoce que «era la noche de fin de año y no sabíamos a donde ir, entonces, Juan dijo: ¡vamos a casa de Fernando! (en el Paseo de la Castellana); y nos presentó como dos cantantes callejeros de Zaragoza que no tenían donde dormir y que cantarían a cambio de la voluntad. Recaudamos unas siete mil pesetas (Juan Diego se quedó con el 75 %, asegurando que era lo habitual en los representantes), pero lo que nos impactó fue la magia y el ingenio que Fernando desplegaba al hablar (…) Esa madrugada, nació «La silla de Fernando». Trueba y Luis Alegre exponen igualmente al unísono que “tal vez convenga advertir que nosotros ya éramos fans de Fernando. Nos parecía uno de los más grandes actores, si no el más grande, de la historia del cine español. Y, además, sentíamos debilidad por obras suyas como “La vida por delante”, “El mundo sigue”, “El extraño viaje”, “El viaje a ninguna parte”, “El tiempo amarillo” o “Las bicicletas son para el verano”. Álex de la Iglesia lo definió una vez mejor que nosotros: «Fernando Fernán Gómez es el puto amo». Y Luis Alegre pudo reafirmar que «desde entonces fuimos habituales de su casa y, en el rodaje de “Belle epoque” (Portugal, Verano de 1992), consolidamos nuestra amistad».
David y Luís le proponen a Fernando su idea, un “experimento”: rodar una “película-conversación” y, para su sorpresa, acepta de buen grado protagonizar este documental “desnudo”, en el que la mayor parte del tiempo está él sólo, en primer plano, manejando ala perfección las miradas, la entonación, las pausas, el gesto, el sarcasmo, la contradiccióno el humor. Director y guionista coinciden en afirmar que «(Fernando es) un hombre que posee el humor, la brillantez y la falta de previsibilidad más anonadante. Por eso quisimos retratar su magnetismo, para dejar constancia de su visión vitriólica y poco común de la vida».
A quien le guste Fernando Fernán Gómez, ya con 84 años, va a disfrutar de todos y cada uno de los minutos y a quien no le guste, quizá le sorprenda lo que va a encontrar aquí o quizá le acabe gustando aún menos, pero desde luego a nadie deja indiferente. Este «documental» ha pasado bastante desapercibido para el público en general, pero seguramente a Fernando eso no le habría importado lo más mínimo. Con la visión del documental presenciamos las templadas, reflexivas, desinhibidas y certeras narraciones vitales, de una persona consciente de estar inmerso en el ocaso de su vida, Fernando Fernán Gómez. A pesar de no ser un documental excesivamente original, en lo que al montaje se refiere (cámara fija y Fernando hablando al objetivo, de su vida, su infancia, su trabajo y sus ideas, sobre todo), sigue las reglas clásicas de una entrevista, donde el personaje se encuentra en un lugar cómodo, su casa; y nos habla de pequeños retazos explicativos de su vida con imágenes intercaladas de sus películas y fotos de su infancia, e incluye en su banda sonora temas de Enrique Morente Cotelo (Granada, 25 diciembre 1942 – Madrid, 13 diciembre 2010) y Bebo Valdés (Quivicán, Cuba 9 octubre 1918- Estocolmo, Suecia, 22 marzo 2013). Aun así es un documental que no aburre y el continuo y sabio monólogo de un artista único sigue un ritmo vertiginoso hasta el final. En concreto, sobre la Guerra Civil, Fernando dice: «Excepto al Gobierno, que después se publicó que le pilló desprevenido, el pueblo español, todas las personas normales, todos, sabíamos que se estaba produciendo la Revolución, que había ocupaciones de los campos en Andalucía, lo ocurrido en Asturias, que de un momento a otro iba a estallar una rebelión militar financiada por los ricos para contener dicha Revolución. O sea, que esto parecía una anormalidad bastante normal que todos esperábamos», y sobre su cambiante ideología política: «Hasta la Guerra Civil yo me creía de derechas. Yo veía que siendo de izquierdas se era pobre y de derechas se era rico».
La productora ejecutiva del documental es la actriz Ariadna Gil Giner (Barcelona; 23 enero 1969), la directora de producción, Eva Taboada Bartomeu. El director de fotografía, Mischa Lluch (Madrid, 18 enero 1974). La empresa productora es “Buenavida Producciones S.L.” en asociación con “TCM Producciones”. Forman parte del equipo técnico, Jonás Rodríguez Trueba (Madrid, 30 noviembre 1981), Gustavo García Salmerón (Madrid, 27 Agosto 1970), Elena Anaya Gutiérrez (Palencia, 17 julio 1975), Lucía Jiménez Arranz (Segovia, 21 noviembre 1978) y Natalia Verbeke (Buenos Aires, 23 febrero 1975). En el documental, Fernando convierte la charla en una suerte de autobiografía no exenta de humor y nos muestra un retrato que nos acerca a su interesante y genial mundo: como escritor, como director de cine, como actor. Fernando, agrio y de mal carácter, él mismo confiesa que se dio cuenta que le convenía fomentar ese “papel de antipático” por lo pesada que era casi toda la gente que le rodeaba.
Como dice el crítico de cine y periodista Carlos Sánchez Boyero (Salamanca, 2 mayo 1953) es: “Excelente documental e impagable entrevista”. Lástima que dure poco tiempo. Y el metraje final hubo que elegirlo durante la nada sencilla empresa de seleccionar y montar escenas de entre más de 20 horas de grabación, para que pareciera un “continuum”: con sentido, atractivo y con sensación de verismo y espontaneidad.
El monólogo de Fernando tiene fuerza, vierte sabiduría por doquier y recuerdos muy valiosos sobre el Madrid sitiado y hambriento de la Guerra Civil y sobre el infortunio de una mísera posguerra; cuenta historias de un joven trasnochador por bares, garitos e incluso la cafetería del aeropuerto madrileño. Bebe más de la cuenta porque le gusta beber y cambia, por consejo de un amigo, la ginebra por el güisqui, su amor por la lectura y su fervor por Víctor Hugo y la pobreza de nuestro cine que habría podido aspirar a más altos vuelos. Reflexiona sobre la mentalidad española, sobre la pandémica envidia, que más que envidia es «menosprecio de la excelencia» y todo, sin olvidar un personal lamento por no haberse comprometido más con sus convicciones libertarias.
Colofón
Enrique Fernández Lópiz, profesor titular del Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universidad de Granada, en “La silla de Fernando (2.006), de David Trueba y Luis Alegre”, refiere que “Aconsejo a quien no haya visto esta cinta documental que lo haga, sobre todo si le gusta Fernando Fernán Gómez y si le gustan las historias de vida de un personaje cimero que dejó obra: ¡qué importante eso de dejar obra, huella, algo que sirva a los demás, al fin, a nuestros semejantes!”. Fue presentada, en una sesión especial de la sección “Zabaltegi”, durante la 54 Edición del Festival de Cine de San Sebastián, celebrado entre el 21 y el 30 de septiembre de 2006 y dos días antes de su “estreno oficial”, fue pre estrenada en el madrileño “Cine Capitol”, en un acto, a modo de homenaje a Fernando, al que asistieron, entre otros muchos, Alejandro Amenábar, José Luis Balbín, María Barranco, Ana Belén, Miriam Díaz Aroca, Gabino Diego, Natalia Figueroa, Pablo Guerrero, José Antonio Labordeta, Fernando León de Aranoa, Eduardo Noriega, Luis Pastor, Antonio Resines, José Sacristán y Concha Velasco.
En el año 2007, “La silla de Fernando” fue nominada en los “Premios Goya”, como “Mejor Película Documental”. El pasado año 2021, con motivo del Centenario del Nacimiento de Fernando FernánGómez (1921 – 2021), se puso a la venta el Documental “La silla de Fernando”, en formatode doble DVD, que incluye en los “Extras”, más de dos horas de metraje añadido a laconversación original. Fernando confiesa que lo que él quiere, es “dar una lección, ya que por mis muchos años me puedo permitir este gusto, a todos los que creen que el futuro está en sus manos y no en las manos de quienes se han apoderado del futuro de todos nosotros”.