Por, Domingo A. López Fernández
Cronista Oficial de la ciudad de Motril
La iglesia Mayor vuelve a ser escenario para el canto del “Stabat Mater Dolorosa”
A las puertas de la Semana Mayor y siguiendo la tradición impuesta desde hace diecisiete años, la iglesia de la Encarnación ha vuelto a ser el marco elegido para la interpretación del himno del “Stabat Mater Dolorosa”, título que traducido al castellano viene a significar que ”Estaba la Madre sufriendo”. Tal como estaba programado, la puesta en escena del mismo se ha verificado a la conclusión de la eucaristía de la tarde, solemne función que ha venido a coincidir con la celebración del triduo que la popular cofradía de la Borriquita ha dedicado a sus titulares durante los días 26, 27 y 28 de marzo.
En verdad el canto del “Stabat Mater Dolorosa” ha quedado ya institucionalizado en nuestra ciudad como un acto de obligado cumplimiento, sobre todo desde que se supo que fue el Cardenal Belluga quien ordenó que todos los viernes del año fuese imperativa su interpretación en la capilla que el mismo fundó y que las trágicas consecuencias de la guerra civil nos ha privado de poder disfrutar. Desde luego fue la capilla mejor dotada de todas las existentes en la iglesia parroquial y se llevó a cabo bajo su supervisión cuando el cardenal ya ostentaba su cargo en Roma. Este sentido canto que se reitera especialmente en la cuaresma enmarca el contenido de su letra en la doceava estación del vía crucis, momento en el que se representa a Jesús al pie de la cruz junto a su Madre, la Virgen María y San Juan. La escena ha inspirado a un sinfín de compositores que han puesto su saber y su estilo musical al servicio de la religiosidad de su época, entre los que se pueden citar a John Browne, autor del primer Stabat Mater polifónico que data de la segunda mitad del siglo XV, a Polulenc, Palestrina, Vivaldi o Pergolesi, entre otros, siendo este último el que más se ha podido interpretar en la iglesia Mayor parroquial.
La realidad es que los difíciles momentos que estamos viviendo por causa de la pandemia ha provocado que la celebración del Stabat Mater Dolorosa haya quedado al borde de su suspensión y de hecho, hasta el mismo jueves, no pudo ser ratificada por la junta de gobierno de la Agrupación de Hermandades y Cofradías. Afortunadamente se ha podido materializar siguiendo en todo momento las medidas de prevención que se exigen a la entrada de la iglesia, con lo que este canto desgarrado y doloroso que idealiza el momento en que Jesús se encuentra al pie de la cruz ha reanudado esta sentida tradición que tan solo se vio interrumpida el año precedente con motivo del confinamiento a que nos vimos sometidos.
Este año la interpretación del canto del “Stabat Mater Dolorosa” ha quedado a cargo de un grupo de cámara venido expresamente desde Granada y que está compuesto por un terceto de cuerda y un cuarteto de voces que actúa bajo el nombre de Granada-Ensemble. Ambos han interpretado la versión del “Stabat Mater Dolorosa” de Josef Rheinberger que data del año de 1864. La versión está considerada como una de las obras más bellas de la historia en cuanto a sus cualidades musicales, entre ellas su rica polifonía, su efecto tonal y la amplitud de su concepción. La puesta en escena del“Stabat Mater Dolorosa”en la iglesia Mayor se pudo iniciar con un cierto retraso sobre la hora programada, lo que facilitó el acomodo de los fieles presentes en los bancos del templo siguiendo las consabidas medidas de seguridad. Como todos los años ha presidido el canto de esta sentida plegaria la imagen de Nuestra Señora de los Dolores, titular mariana de la cofradía del Santo Sepulcro, que fue ubicada en sus andas junto al crucero de la iglesia para conferirle al acto la solemnidad que merece. Concluida la actuación, el terceto de cuerda interpretó el “Ave María” de Giulio Caccini en honor de la Virgen de los Dolores, que magistralmente ha sido cantado por la solista Clara Triviño.
Como viendo siendo habitual, el canto del “Stabat Mater Dolorosa” de este año de 2021 ha contado con la presencia de una comisión municipal que ha encabezado la primer edil, Luisa María García Chamorro, que ha ocupado junto a varios concejales los bancos reservados a autoridades. Solo resta decir que ha sido tal el éxito de esta última interpretación que la primera autoridad local ha felicitado personalmente a su interprete, Clara Triviño, de la misma forma que a título personal se lo han trasmitido numerosos fieles presentes.