José Manuel González/EL FARO
La primer edil de la Villa, María Eugenia Rufino, y el concejal de Educación, Ignacio Trujillo, se han sumado a la manifestación de este lunes en las puertas de los colegios afectados
La alcaldesa de Salobreña, María Eugenia Rufino, junto con el concejal de Educación, Ignacio Trujillo, se han sumado este lunes a la manifestación que ha recorrido los centros escolares de la Villa en protesta por la situación de los comedores escolares cuyo servicio continúa sin licitarse a una semana de que se retome el curso escolar.
La primer edil de la Villa ha calificado la situación de “dramática e inaudita” ya que por la “inacción de la Junta de Andalucía” se van a ver afectadas tanto las familias del municipio que hacen uso del comedor, como las trabajadoras de este servicio y toda la sociedad en general. En Salobreña, el hecho de que el Gobierno andaluz haya dejado de licitar un servicio tan importante va a suponer que el próximo día 8, cuando se retome el curso escolar tras las vacaciones de Navidad, se vean afectados los centros Juan Ramón Jiménez, Segalvina, Mayor Zaragoza y el Cervantes de Lobres, que se quedarán sin este servicio.
“La falta de acción de la Junta de Andalucía conllevará a que muchas familias se vean abocadas a que algunos de sus miembros tengan que dejar de trabajar para cubrir las necesidades de sus hijos”, ha apuntado María Eugenia Rufino recordando que también dejará sin empleo a muchas personas de la localidad “ampliando además la brecha entre hombres y mujeres ya que la mayoría de las trabajadoras de este servicio son mujeres”.
La alcaldesa ha recordado que el servicio de comedor escolar también hace una labor social ya que los niños que se encuentran en situación de riesgo de exclusión reciben tres comidas a través del Plan de Garantía Alimentaria. “Es un servicio que se había creado con mucho esfuerzo y creyendo en lo público”, ha concluido la alcaldesa de Salobreña, María Eugenia Rufino.