R.E.F.
El popular barrio motrileño no olvida sus raíces y su conexión con el pasado azucarero, manteniendo muchas de las costumbres populares de la ciudad
Al cobijo de la emblemática chimenea de lo que fuese el complejo fabril de San Fernando, el popular barrio del Cerrillo no realizará este año sus tradicionales fiestas, como el resto del municipio; pero sí llevará a cabo diversos actos de rememoranza de su tradición como enclave histórico de la ciudad, y como lugar habitado por familias trabajadoras y muy vinculadas a las costumbres más señeras de Motril.
La teniente de alcalde de Participación Ciudadana, Inmaculada Torres Alaminos, ha destacado hoy el interés vecinal en preservar sus tradiciones “y a pesar de que no se pueden realizar ninguno de los actos festivos habituales, sí quedará constancia de que sus habitantes recuerdan sus fiestas y las tienen muy presentes para continuar con ellas en los próximos años”, decía la edil. Torres Alaminos, quien recordó el carácter “familiar y acogedor del Cerrillo Jaime”, apeló a la participación vecinal con el arreglo de balcones y fachadas, los disfraces infantiles o la demostración de arte (en todas sus expresiones) de todas las personas. “Esperamos que el próximo año la chimenea vuelva a echar humo y que se puedan retomar las celebraciones de este y todos los barrios de Motril”.
“Animamos a todos los habitantes a participar, sólo hay que inscribirse hasta las 13 horas del viernes bien en la asociación, bien en Participación Ciudadana, y que se vea un poco de alegría en nuestras calles”, decía la presidenta de la Asociación de Vecinos del Cerrillo, Mari Cruz Ruiz, quien señaló la importancia de gestos sencillos y colaborativos como los que se pretenden, a fin de mantener viva la llama de la tradición que, en este barrio, cobra mucha más fuerza.
