R.E.F.
La “nueva normalidad “se parece bastante a la anterior, ya que debido a esta crisis sanitaria se hace más evidente, si cabe, las condiciones del empleo en nuestra provincia. El mes de mayo observamos unos valores negativos de crecimiento de desempleo (-277) frente al incremento de 2.111 personas desempleadas que nos deja el mes de junio, observando un total de 103.088 personas desempleadas.
Las características de nuestro mercado laboral son: precario, temporal y estacional anclado en sectores tradicionales, turismo, servicios y agricultura Respecto al año anterior supone un aumento de 24.367 personas más. Así lo demuestran las cifras, del total de parados la mayor parte corresponde al sector servicios (67.924) y la Agricultura (10308). En ambos sectores aumentan el número de parados. Sólo en Industria (-78) y Construcción (-412) se produce una pequeña disminución del número de parados.
Lo que demuestra el agotamiento de estos sectores, especialmente en el contexto de crisis turística en la que estamos inmersos. La crisis actual sólo recrudece esta situación y hace evidente la necesidad de cambiar el modelo social y económico y poner el acento en otros sectores, fomentado la implantación en nuestra provincia de empresas que generen valor añadido al tejido productivo.
Es un cambio imprescindible y es una obligación de la Administración transformar este tejido productivo que en la provincia de Granada es dependiente del sector turístico. Es indispensable la creación de un plan de impulso económico a nivel provincial, sobre todo para aquellos sectores que durante más tiempo van a sufrir la paralización de la actividad y que son pilares fundamentales de nuestra economía.
Ejemplo de ello son las 37.733 personas que no cobran ninguna prestación, para CCOO, a los trabajadores y trabajadoras temporales, precarios, que han perdido su empleo. Y para ello, nuestros servicios públicos son esenciales: la Dependencia, la Sanidad, la Educación, las administraciones públicas que tramitan cientos de solicitudes de ERTEs y ayudas. En definitiva, se hace necesario reforzar estos servicios que son los que sacan adelante a este país en momentos difíciles.
Por todo ello CCOOO hace un llamamiento a la unidad de administraciones, agentes económicos y sociales para que la salida a esta situación sea lo menos dramática posible para la clase trabajadora. La prioridad está en proteger a los más vulnerables, a los trabajadores y trabajadoras temporales, precarios, que han perdido su empleo.