R.E.F.
La moción ha sido propuesta por Andalucía Por Sí, su portavoz, David Martín, destaca que la anchura de las aceras de la calle, que da acceso a la puerta principal del hospital Santa Ana, impide el paso de personas en sillas de ruedas o familias con carros de bebé que tienen que circular por la calzada a pesar del intenso tráfico
El Pleno de la corporación municipal de Motril, celebrado este viernes con carácter extraordinario, ha aprobado por unanimidad la moción presentada por el portavoz de Andalucía Por Sí, David Martín, que proponía la mejora de la accesibilidad de la calle Gravina, dando más anchura a las aceras y suprimiendo los únicos cuatro aparcamientos libres que hay en una vía de 100 metros de longitud.
Martín ha destacado que la propuesta reciba el respaldo de todos los representantes porque demuestra la sensibilidad de todos en un tema como es la accesibilidad en igualdad para todas las personas.
La calle es la que da acceso a la puerta principal del Hospital Santa Ana de Motril, por lo tanto, la circulación de vehículos y de peatones es elevada. La anchura actual de las aceras es de 55 centímetros en la margen derecha y de 61 en la margen izquierda, lo que impide el paso de sillas de ruedas o carros de bebé, poniendo en riesgo a sus usuarios y acompañantes al tener que ir por la calzada.
El portavoz del partido andalucista ha resaltado además el compromiso de los vecinos que han sido los primeros en proponer que se eliminaran los aparcamientos que hay en la calle para mejorar el paso de personas, a pesar del poco espacio libre que hay para estacionar vehículos por la zona.
La moción proponía que sean los técnicos municipales los que estudien la viabilidad del proyecto, garantizando el paso de vehículos prioritarios como ambulancias o bomberos. La propuesta tampoco reclama unos plazos concretos, “se pedía que se incluya en el plan de obras futuras que tiene el Ayuntamiento, cuando haya disponibilidad de presupuesto y material para ejecutar la obra, así como de empleados municipales», concluye Martín.