EL FARO
Denuncia y rechaza el inicio de diversos expedientes disciplinarios a trabajadores y trabajadoras municipales por manifestar sus quejas, o mostrarse disconformes en sus perfiles sociales con las medidas adoptadas por el Ayuntamiento para preservar su salud y seguridad laboral. Reitera su compromiso de colaboración institucional para contribuir a la recuperación económica y social de Motril a través de un Pacto Local que cuente con el acuerdo de todos los actores políticos, económicos y sociales para buscar una salida con garantías de esta crisis, sin que ningún motrileño se quede atrás
«No podemos compartir que en momentos de emergencia como este la actitud de la alcaldesa de Motril sea la de tirar de régimen disciplinario para acallar las críticas que algunos empleados y empleadas municipales realizaron en sus perfiles sociales de las actuaciones municipales que se llevaron a cabo en los primeros momentos de la crisis sanitaria» señalan desde IU.
Hay que señalar que los expedientes se incoan a trabajadores y trabajadoras municipales que han estado en la primera línea de las actuaciones para contener la pandemia desde el primer momento: peones de limpieza, operarios y conserjes, entre otros, puntualizan.
«Rechazamos de plano esta actitud que, a nuestro juicio, revela un comportamiento poco democrático y, desde luego, incompatible con la deseable capacidad para asumir y gestionar las críticas que se les supone a todos los políticos que desempeñan responsabilidades públicas», declara Jose Llorente, concejal de la formación. «Todo lo contrario de lo que está haciendo Luisa García Chamorro que, en vez de responder o rechazar públicamente dichas críticas, propone actuaciones disciplinarias».
La sociedad motrileña no ha dejado de reconocer, sigue haciéndolo y no podrá dejar de hacerlo en mucho tiempo, la inmensa labor y la entrega que han venido demostrando los empleados y empleadas municipales a lo largo de la gestión de la crisis y su papel determinante para la contención de la pandemia y para el mantenimiento de los servicios públicos, argumenta el concejal.
Llorente ha pedido a la alcaldesa que no se inicie la tramitación de dichos expedientes y demuestre altura de miras y voluntad de diálogo y entendimiento con todos los colectivos ciudadanos.
«De otro modo no estaríamos ante un buen punto de partida para acometer todos los esfuerzos que serán necesarios llevar a cabo para la reconstrucción económica y social de nuestra ciudad. Desde el primer momento este Grupo Municipal, y el resto de los grupos de la Corporación, ha actuado desde la lealtad institucional y la serenidad, evitando la confrontación política y respetando las decisiones y el espacio de gestión del gobierno local de Motril», argumenta Llorente.
Únicamente hemos reclamado a la alcaldesa «claridad, transparencia y colaboración en la gestión de la crisis. También hemos manifestado nuestra preocupación por las condiciones en las que los empleados y empleadas municipales debían llevar a cabo su tarea para garantizar los servicios públicos», manifiesta el concejal.
«Hemos evitado, en todo momento, el rifirrafe político y la controversia en estos aspectos. Por encima de todo, en estos momentos, desde nuestra formación hemos querido sumar y arrimar el hombro. Nos enfrentamos a una realidad dramática en nuestra ciudad que hay que resolver. Es necesario proteger a las familias, ayudar a los trabajadores, trabajadoras, empresas y autónomos, así como al tejido social, a la sociedad civil organizada» dice Llorente.
Por ello IU reitera su propuesta para alcanzar un Pacto Local por la recuperación económica y social de Motril con la participación de todos los grupos políticos, los agentes económicos y sociales, empresas y sindicatos y la sociedad civil organizadas que permita una salida socialmente responsable de la crisis.
Para el concejal de IU-Equo son muchas las cuestiones que se deben abordar desde lo local en los próximos meses y años: desde el propio papel de los Ayuntamientos en la gestión de la crisis hasta la reformulación de los espacios urbanos o la revisión y adecuación de los modelos de desarrollo turístico y del productivo, económico y social. Cuestiones de tal trascendencia para nuestro futuro que hacen imprescindible la mayor participación y acuerdo que resulten posibles.
«Es el momento de dialogar y sumar esfuerzos para recomponer el destrozo que se está produciendo, sentando las bases del desarrollo de nuestra ciudad en términos de crecimiento económico y de empleo», concluye Llorente.