José Manuel González/EL FARO
Los servicios sociales del Ayuntamiento motrileño han atendido desde finales de marzo a unos treinta usuarios a los que se ha prestado asistencia y atención de necesidades sanitarias, psicológicas, sociales y formativas
El Ayuntamiento de Motril ha procedido al cierre del dispositivo provisional de atención a personas sin hogar organizado en el pabellón municipal de deportes y ha trasladado a las personas que aún permanecían alojadas en este reciento a otros recursos de alojamiento más idóneos. El pabellón municipal abrió sus puertas el pasado 19 de marzo para dar respuesta a la necesidad de confinamiento a diferentes personas sin hogar que no disponían de lugar adecuado para pasar el período de confinamiento decretado para frenar la propagación de la pandemia causada por el COVID-19.
Durante este tiempo, el Ayuntamiento de Motril, a través del área de Acción Social, ha asumido la responsabilidad de atender y cuidar a casi una treintena de personas que se encontraban en situación de sinhogarismo cuando se decretó el estado de alarma del país, todas ellas con múltiples variables y un riesgo de exclusión social, alejadas de sus familias y sin recursos para hacerse cargo de su situación personal. A partir de este momento, se realizó por parte del equipo profesional de Servicios Sociales un diagnóstico individualizado y una intervención y seguimiento de cada uno de ellos, cubriendo un amplio abanico de necesidades personales, más allá del propio alojamiento.
Este dispositivo también incluyó la organización y puesta en marcha de manera inmediata de un conjunto de normas de funcionamiento que garantizaran las medidas de seguridad decretadas. De forma paralela, se organizó todo un dispositivo básico en colaboración con Protección Civil, Caritas y Cruz Roja Española para cubrir todas sus necesidades de alimentación, higiene y vestido de los usuarios de este servicio social. A partir de ese momento, se ha trabajo con decisión para mejorar todos aquellos aspectos relacionados con la convivencia, la atención de necesidades, psicológicas, sociales, formativas e incluso lúdicas. Para ello, se ha contado con un equipo multidisciplinar compuesto por psicólogos, educadores, maestros, técnicos y monitores de la red municipal de ludotecas y trabajadoras sociales del Área de Acción Social, en estrecha coordinación con el personal de limpieza, conserjes y guardas de seguridad.
Con todo este despliegue de recursos humanos y materiales, se ha conformado un equipo que se ha conseguido que los usuarios de este pabellón se sintieran acogidos y respetados durante el tiempo de confinamiento y se ha tratado de buscar salida a sus circunstancias particulares de la manera más digna posible. Para ello, se han movilizado todos los recursos disponibles y necesarios, posibilitando que algunos pudieran encontrar otros centros más adecuados para el tratamiento de sus problemáticas.
Coordinación municipal y colaboración privada
En algunos casos, se ha conseguido el acercamiento hacia oportunidades de empleo para promover su inserción laboral o se ha facilitado el traslado a sus residencias de origen donde pudieran encontrar un apoyo familiar o social más estable. En este aspecto ha sido importante la colaboración con las Áreas de Igualdad, Formación y Empleo y Educación del Ayuntamiento de Motril, así como del Centro Comarcal de Drogas. También ha tenido gran importancia la colaboración de diferentes empresas y comercios del municipio (Alcampo, Costa Vending o Farmacia Valdivia, entre otros) que han colaborado con donativos de materiales específicos y concretos que han servido para la mejor atención de estas personas.
Debido a todo el trabajo realizado, el número de usuarios alojados en el pabellón se ha ido reduciendo paulatinamente, por lo que, finalmente y en colaboración con la Asociación Benéfico Social Virgen de la Cabeza y el albergue de Jesús Abandonado, estas personas serán atendidas en sus instalaciones y seguirán contando con todo el apoyo del área Acción Social.
Cabe recordar que el día 13 de abril se realizaron pruebas rápidas de COVID-19 a las casi 80 personas -entre empleados y usuarios- que se encontraban en el pabellón y que todos ellos han dado negativo en la prueba. Desde el Ayuntamiento se ha destacado el intenso trabajo realizado y todas las medidas de seguridad adoptadas, que han logrado preservar unas condiciones sanitarias óptimas y evitar contagios, pese a la población tan vulnerable y expuesta con la que se ha venido trabajando. En este sentido, hay que destacar la importante labor sanitaria realizada por equipo profesional del Centro de Salud Motril-Centro, que ha atendido diariamente todas las necesidades que demandaba el Consistorio para la correcta atención de estas personas.
Desde el Consistorio motrileño, se ha querido agradecer la “coordinación”, el “esfuerzo personal” y la “extraordinaria labor profesional y humana” que han mantenido y realizado los numerosos trabajadores de todas las áreas municipales implicadas y se ha subrayado la “apuesta rápida y eficaz por los sectores más desfavorecidos de la sociedad, en unos momentos de extraordinaria dificultad por la situación de crisis sanitaria generada por el coronavirus”.