“Si yo fuese a un lugar para hacer turismo y viese la bandera de Andalucía hecha jirones reclamaría que la arreglasen, que pusieran una nueva, ya que me sentiría ofendido al ver el símbolo de mi región como algo a lo que no se presta la atención debida, y eso es lo que deben sentir los de Baleares, Castilla-La Mancha y otras comunidades autónomas que están representados por jirones de lo que en su momento fue una bandera, y encima frente a la oficina de turismo y bajo el mayor emblema de Motril, el cerro de la Virgen de la Cabeza”, explica Santiago Medina, presidente del MOTRIL, (Movimiento Trabajador Ilustrado).
Del mismo modo ha criticado que hace unos días se cayera la banderola que anunciaba la entrada al museo preindustrial del azúcar y que llevaba aguantando varios días, medio caída, agarrada sólo por unos hilos, sin que nadie hiciera nada al respecto, mostrando así el interés de los responsables políticos por el turismo local.
Para Medina no basta con hacerse una foto colocando las banderas de las comunidades autónomas, sino que “..si se hace hay que tener previsto que el tiempo, el viento, el agua causan desperfectos en las banderas y hay que sustituirlas cada vez que sufran daños, ya que esas banderas representan el espíritu de muchas personas, una serie de conceptos que se unifican y se simbolizan con unos colores y unos elementos y por tanto las banderas siempre deben estar en perfectas condiciones, tal y como a los andaluces nos gustaría ver nuestra bandera en otro lugar.”
Medina exige al alcalde de Motril que “sustituya de inmediato, sin ningún tipo de excusa, todas las banderas dañadas y que así se haga de ahora en adelante cada vez que estas sufran daños, ya que Rojas habla mucho de turismo y al final descuida los elementos más básicos para fidelizar a los turistas del resto de España, ofendiéndoles al permitir que ondeen banderas que sólo muestran la “miopía turística” del alcalde motrileño.”